‘Contra la pared’: Estrella Sin Michelín
En 'Contra la pared' queremos conocer más a los influencers y microinfluencers gastronómicos que levantan cada día Instagram con sus recetas, crónicas, consejos o planes. Tan solo 7 preguntas (el interrogatorio es siempre el mismo para todos) y total libertad para contestar.
Lubina al horno vs. Sushi.
El sushi, salvo en contados lugares como Kappo, Umiko o Gamán (por citar algunos de Madrid) me parece bastante sobrevalorado y a un precio que no se corresponde ni con el producto que se recibe ni con la calidad ni la cantidad.
Me quedo, casi por descarte, con la lubina. Aunque no es uno de mis pescados favoritos en algunos sitios la bordan, sobre todo, a la sal.
¿Vivir toda la vida sin queso o vivir toda la vida sin chocolate? (Esta es de Scrolling after sex, de Leti Sala).
Podría vivir sin chocolate, me costaría pero creo que podría hacerlo. Sin queso no aguanto ni una semana. Es uno de mis vicios. Me encanta ir a queserías como Cultivo, Cuenllas o incluso en El Corte Inglés (donde tienen un surtido bastante digno) y comprar, aprender nuevos quesos… Siempre con un buen pan y un poco de vino.
Un lugar para declararte. ¿Y un restaurante?
Les Prés d'Eugénie Michel Guérard y su restaurante de tres estrellas. Es el lugar perfecto, no hay nada igual. Y si a un hotel de ensueño le sumamos la cocina de Michel Guerard, el sí lo tienes casi asegurado.
Algo que no soportas en una mesa.
La mala educación. Con todo lo que ello engloba. Desde la falta de respeto al personal como los malos modales a la hora de comer. Me levantaría y me iría. Por eso sólo me siento a comer con gente a la que conozco muy bien.
Alguien con quién te gustaría cenar.
Con mi mujer. Puede parecer extraño pero es que en los últimos cinco años, con dos niñas pequeñas y otra a punto de llegar, no hemos tenido mucho tiempo para nosotros. Y, sinceramente, nada me apetece más que ir a cenar con ella. La invitaría a La Tasquita de Enfrente a disfrutar del producto de Juanjo, o a un pequeño bistrot francés tipo Hortensio o Le Bistroman Atelier
Tu mejor receta.
Yo cocino más bien poco, por falta de tiempo principalmente. Tiro mucho de latas de Doña Tomasa o La Riviere que me arreglan muchas cenas. Metido en la cocina, me desenvuelvo con la fritura y creo que hago unas chuletas bastente dignas. Las pido directamente las cárnicas, sobre todo a Guikar y a mi buen amigo Luismi Garayar, así tengo un muy buen producto que con no estropearlo sirve para comer un domingo acompañado de un buen vino. En cuanto al tema dulce, sólo sé hacer la tarta de galletas con chocolate que hacía mi madre, aunque me sale bastante buena tengo que reconocer que ella la hacía mucho mejor…
Un sabor de la infancia.
Muchos. De mi madre recuerdo sus huevos rellenos, la nata montada de los crepes que hacíamos para merender un domingo, la tarta de galletas de chocolate que te he comentado antes, los flanes de mi abuela materna, los arroces caldosos y las rosquillas de mi abuela paterna, el lechazo asado de mi padre… He tenido mucha suerte porque he crecido rodeado de gente que cocinaba francamente bien.